Campaña #SoyIncorruptible: una versión más realista

Hace unos meses los compitas del Consejo Coordinador Empresarial nos hicieron el paro de sacar una campaña para concientizar a mexicanas y mexicanos sobre la corrupción en distintos espacios, entre ellos el metro de la Ciudad de México, que transporta a más de 1600 millones de personas al año, según sus propias cifras.

“Seguro abordará los problemas más graves que se presentan cotidianamente en ese medio de transporte”, pensé… Porque la Ciudad de México, para quienes no lo saben, tiene el transporte público más peligroso del mundo para las mujeres, lo cual, puesto en otras palabras, en realidad revela que los mexicanos son los hombres más peligrosos para las mujeres en todo el mundo en los espacios públicos. Entonces, seamos claras: los problemas que aquejan de manera más grave al transporte público en la Ciudad de México son el abuso y el acoso sexual hacia mujeres y niñas, y que los hombres invaden cotidianamente los vagones exclusivos, creados, gracias a la lucha feminista, con el objeto de que podamos estar a salvo de sus violencias. De nada valen los letreritos color rosado que el Gobierno de la ciudad ha puesto indicándoles con dibujitos que ahí sólo entran mujeres, niñas y niños: ya hasta un jefe de estación fue asesinado por un hombre, por pedirle que saliera de la sección de mujeres. Así de grave la situación. Para mi sorpresa, sin embargo, la campaña publicitaria no mencionaba una sola palabra sobre esta grave problemática. En cambio, los mensajes que exhibía eran del tipo “Yo soy de los que paga su entrada”, “Yo sí respeto la línea amarilla” y a una mujer …a una mujer diciendo “Yo soy de las que respeta los asientos reservados”, cuando, si de espacios reservados hablamos, el problema más grave lo representan los hombres… En fin, que al continuar analizando los contenidos de la campaña, cuyos letreros estaban distribuidos a lo largo de toda la ciudad, pude verificar que en nada me identificaba como ciudadana con las presuntas problemáticas que abordaban. “Soy de las que no pide mordida a los proveedores”… ¡!¿? Vaya, ¡hasta a una niña pusieron diciendo “Soy de las que no copia para pasar”…!

Entonces, en Munia Curvitain decidimos echarles la mano a los compitas del Consejo Coordinador Empresarial para brindarles orientación sobre algunas de las problemáticas graves que sí enfrenta el país, como el abuso sexual, el acoso sexual y la violencia feminicida, que le arrebata la vida a miles de niñas y mujeres cada año. El resultado fue esta campaña que aquí le venimos ofreciendo, con el objeto de poner nuestro granito de arena en contra de la corrupción que se ejerce en el ámbito de lo real en nuestro país todos los días, a la vista de todxs.

Hasta que la justicia se siente entre nosotras.

Por nada.